El cambio climático provoca desastres en América Latina

El tiempo extremo y los impactos del cambio climático, como las sequías y precipitaciones extremas, las olas de calor terrestres y marinas y el derretimiento de los glaciares, repercuten desde la Amazonía hasta los Andes y desde las aguas del Pacífico y el Atlántico hasta los fondos nevados de la Patagonia. Mientras la histórica ola de calor que azota Europa está causando muchas víctimas a raíz de la sequía y los incendios, la Organización Meteorológica Mundial (OMM) alertó que tanto esos fenómenos como el COVID están afectando no solo a la biodiversidad de América Latina, sino también el incremento de la pobreza, el hambre y la desigualdad.


Mientras la histórica ola de calor que azota Europa está causando muchas víctimas a raíz de la sequía y los incendios, la Organización Meteorológica Mundial (OMM) alertó que tanto esos fenómenos como el covid están afectando no solo a la biodiversidad de América Latina, sino también el incremento de la pobreza, el hambre y la desigualdad.

El tiempo extremo y los impactos del cambio climático, como la sequías y precipitaciones extremas, las olas de calor terrestres y marinas y el derretimiento de los glaciares, repercuten desde la Amazonía hasta los Andes y desde las aguas del Pacífico y el Atlántico hasta los fondos nevados de la Patagonia.

El informe sobre el estado del clima en América Latina y el Caribe 2021 revela que las tasas de deforestación en la región fueron las más altas desde 2009, en un golpe tanto para el ambiente como para la mitigación del cambio climático. Los glaciares andinos perdieron más del 30% de su superficie en menos de 50 años.

La deforestación en la selva amazónica brasileña se duplicó en comparación con la media de 2009 a 2018, alcanzando su nivel más alto desde 2009. En 2021 se perdió un 22% más de superficie forestal que en 2020. La megasequía de Chile Central, que lleva 13 años, es la más larga en al menos 1.000 años.

Las lluvias extremas de 2021, con valores récord en muchos lugares, provocaron inundaciones y corrimientos de tierra. Se produjeron pérdidas considerables, como cientos de víctimas mortales, decenas de miles de viviendas destruidas o dañadas y cientos de miles de personas desplazadas. Las inundaciones y corrimientos de tierra en los Estados brasileños de Bahía y Minas Gerais provocaron pérdidas estimadas en US$3100 millones.

Prevé el informe que el aumento del nivel del mar y el calentamiento de los océanos sigan afectando a los medios de subsistencia, el turismo, la salud, la alimentación, la energía y la seguridad del agua en las zonas costeras, especialmente en las pequeñas islas y en los países de América Central.

Fuente: https://www.msn.com