El presidente iraní, Masud Pezeshkian, advirtió por su parte, que la capital Teherán podría tener que ser evacuada debido a la escasez de agua, si no llueve antes de que termine el año. “Si no llueve, tendremos que empezar a racionar el agua en Teherán entre finales de noviembre y principios de diciembre”, dijo Pezeshkian en un discurso transmitido por la televisión estatal. La falta de precipitaciones afecta a todo Irán, aunque la megaciudad de más de 10 millones de habitantes es especialmente vulnerable.
Irán anunció este sábado (08.11.2025) que planea cortar el suministro de agua periódicamente en Teherán para limitar el consumo, ya que el país se enfrenta a una de las peores sequías de las últimas décadas. “Esto evitará el desperdicio, aunque cause algunas molestias”, declaró el ministro de Energía, Abbas Aliabadi, en la televisión estatal.
Varios medios de comunicación locales informaron que ya se estaban llevando a cabo cortes nocturnos en la megaciudad de más de 10 millones de habitantes.
La medida se condice con los informes entregados por el Instituto de Investigación de Agua de Irán, que ya advirtió que si se mantiene la escasez de lluvias en Teherán será necesario recortar en un 20 % el consumo de este bien para hacer frente a una “situación crítica”.
“Si se logra reducir aproximadamente un 20% del consumo actual de agua, será posible superar estas condiciones de sequía a largo plazo”, dijo el director de esta institución estatal, Mohammad Reza Kavianpour, citado por la agencia Tasnim.
El científico afirmó que en octubre y noviembre se han producido históricamente lluvias de 60 milímetros en la capital iraní, pero este año aún no ha llovido desde la llegada del otoño, y en 2024 y 2025 las precipitaciones se han reducido en un 40 % con respecto a las registros de las últimas seis décadas. Las previsiones meteorológicas apuntan a que no se producirán lluvias hasta el final del otoño en Teherán, una situación que se extiende a 19 provincias iraníes. “Debemos prepararnos para unas condiciones críticas”, advirtió Mohammad Reza Kavianpour.
Posible evacuación
El presidente iraní, Masud Pezeshkian, advirtió por su parte, que la capital Teherán podría tener que ser evacuada debido a la escasez de agua, si no llueve antes de que termine el año. “Si no llueve, tendremos que empezar a racionar el agua en Teherán entre finales de noviembre y principios de diciembre”, dijo Pezeshkian en un discurso transmitido por la televisión estatal.
“Incluso si la racionamos y sigue sin llover para entonces, nos quedaremos sin agua y tendremos que evacuar Teherán”, añadió, aunque no quedó claro cómo se llevaría a cabo la evacuación de la capital.
La falta de precipitaciones afecta a todo Irán, aunque la megaciudad de más de 10 millones de habitantes es especialmente vulnerable. El director de la empresa regional de agua, Behzad Parsa, advirtió la semana pasada a los medios estatales que solo quedaban dos semanas de agua en el principal embalse que abastece a Teherán.
Irán se encuentra inmerso en una de sus peores sequías en más de medio siglo, con registros de precipitaciones un 77 % por debajo del promedio histórico a lo largo de la nación, lo que ha dejado a las presas a un tercio de su capacidad.
Fuente: https://www.dw.com
