Transcurridos algo más de dos meses desde que se alcanzara el acuerdo de alto elfuego que concluyó las hostilidades entre Armenia y Azerbaiyán en Nagorno-Karabaj, muchos son los analistas que han focalizado su atención en el decisivo papel que el empleo de medios aéreos no tripulados (UAV, por sus siglas en inglés) por las Fuerzas Armadas azeríes ha tenido en el desarrollo del conflicto. Uno de estos análisis, que hatenido cierta repercusión entre expertos, concluye que «Europa debería considerar cuidadosamente las lecciones militares de este conflicto y no descartarlo como una guerra menor entre países pobres.
Como ha quedado patente con ocasión del reciente conflicto en Nagorno-Karabaj, la industria turca de defensa ha demostrado su valor como activo estratégico que proporciona a Turquía una autonomía que le permite, por un lado, reducir su dependencia del exterior y, por otro, influir en su entorno para reforzar su cada vez más asertiva política exterior. Aunque en particular han sido los drones los sistemas de armas que han sobresalido durante este conflicto, la industria de defensa ha evolucionado durante las últimas décadas para cubrir hoy en día la mayor parte de las necesidades de la defensa nacional. A pesar del espectacular desarrollo, esta industria continúa siendo dependiente tecnológicamente del exterior en ciertas capacidades críticas. La manera en que Turquía trate de solventar estas carencias se dejará notar en su inestable equilibrio estratégico entre Rusia, por un lado, y EE. UU. y países occidentales, por otro.
Fuente: http://www.ieee.es