Este megaproyecto, que conectará dos océanos, busca reducir hasta en 14 días en el tiempo de transporte con Asia, facilitando la exportación de productos agrícolas y minerales. Los países que impulsan la obra son Bolivia; Brasil y Perú, que ya cuentan con una gran influencia China en sus proyectos.
El Corredor Ferroviario Bioceánico Central es una de las infraestructuras de transporte más cruciales de América Latina, con una extensión de 3.755 kilómetros que conecta dos océanos. Esta red ferroviaria estratégica unirá el puerto de Santos en Brasil con el puerto de Chancay en Perú, atravesando Bolivia, y tiene como objetivo principal reducir los costos y tiempos de transporte. Al potenciar la exportación de productos agrícolas y minerales desde América Latina hacia los mercados asiáticos.
Este megaproyecto, impulsado por los gobiernos de Brasil, Bolivia y Perú, cuenta con el interés de China, que busca consolidar su influencia comercial en la región. En 2023, los presidentes Luis Arce (Bolivia) y Luiz Inácio Lula da Silva (Brasil) reafirmaron su compromiso con la obra, mientras que el gigante asiático ha mostrado su disposición para financiar parte del proyecto a través de Cosco Shipping Ports.
El Corredor Ferroviario Bioceánico Central, la megaobra que transformará el comercio en Sudamérica
El Corredor Ferroviario Bioceánico Central reducirá en hasta 14 días el tiempo de transporte de mercancías entre Sudamérica y Asia, convirtiéndose en una alternativa más eficiente que el actual paso por el Canal de Panamá. La infraestructura facilitará el comercio de soja, minerales, productos agrícolas y manufacturados, lo que fortalecerá la integración regional.
La inversión estimada para la construcción del tren supera los 10.000 millones de dólares, con un impacto significativo en la logística en Sudamérica. Sin embargo, el proyecto enfrenta desafíos como la necesidad de construir tramos adicionales en Perú, la adaptación de la infraestructura ferroviaria en Bolivia y la superación de obstáculos geográficos en la cordillera de los Andes.
El papel de China en la financiación del Corredor Bioceánico
El interés de China en el Corredor Ferroviario Bioceánico Central forma parte de su estrategia para fortalecer su presencia en América Latina. A través de Cosco Shipping Ports, el país asiático ya ha invertido 3.500 millones de dólares en la construcción del megapuerto de Chancay, que será clave para la conectividad del proyecto.

Además del financiamiento, China aporta su experiencia en infraestructura ferroviaria, facilitando la ejecución de la obra. La posibilidad de una mayor inversión china en el transporte de carga despierta inquietudes en algunos sectores, pero para otros representa una oportunidad de desarrollo económico y modernización logística en la región.
Fuente: https://larepublica.pe